HOGAR

Llegó el invierno: Protege a tus mascotas del frío

Las mascotas sí pasan frío, y debemos cuidar especialmente a los animales enfermos, cachorros o ancianos

Muchos afirman que los animales no necesitan abrigo porque en la naturaleza enfrentan cualquier invierno, por más crudo que este sea. Sin embargo, las mascotas sí pasan frío, y debemos cuidar especialmente a los animales enfermos, cachorros o ancianos.

Si bien es cierto que los animales cuentan con protección natural (el pelo y la grasa), a veces esto no es suficiente para paliar los efectos de las bajas temperaturas. También hay que tener en cuenta que el frío no afecta de igual manera a todos; por ejemplo, los perros de razas nórdicas cuentan con una gruesa capa de grasa y un pelaje bien tupido, pero los de pelo corto y pequeños de tamaño sufren con mayor intensidad.

En perros y gatos ancianos son muy comunes los problemas articulares, como las artrosis a nivel lumbar, patologías que siempre empeoran con el frío intenso, pudiendo llegar a impedir que el animal logre levantarse y caminar. Obviamente es necesario abrigarlos cuando salen a la calle o si están en el jardín.

Los perros de tamaño pequeño también padecen mucho frío, porque su superficie corporal es muy grande en relación al tamaño, y esto facilita la pérdida de calor. Además, sus reservas calóricas son menores y tienen menos capacidad para generar calor durante un tiempo prolongado.

Además, igual que con los humanos, hay que evitar los cambios bruscos de temperatura. Es aconsejable que el perro o gato no esté demasiado cerca de un foco de calor, y que no salga a la calle en horas de máximo frío.

“Cuidar a nuestras mascotas en invierno implica tres dimensiones claves- señala Rodrigo Núñez, gerente comercial de Southoint, empresa importadora y distribuidora de alimentos premium-. Lo primero es mantenerles una nutrición balanceada, las mascotas de exterior suelen comer un poco más para generar calor. No suspender los paseos diarios, pero hacerlos a horas de menos frío y cubiertos con chalecos, y si duermen en el exterior, asegurarse que no esté mojado y que sea un espacio cubierto. Finalmente, chequear que estén las vacunas al día y estar atentos a síntomas como decaimiento, congestión o falta de apetito”. CHH