El Partido Republicano, el Partido Nacional Libertario (PNL) y el Partido Social Cristiano (PSC) oficializaron este viernes 8 ante el Servicio Electoral (Servel) la inscripción de su pacto parlamentario “Cambio por Chile”, consolidando así un nuevo bloque opositor que competirá de manera separada a la coalición Chile Vamos. Sus dirigentes aseguraron que buscan “una nueva forma de hacer política” para enfrentar la delincuencia en todas sus expresiones y recuperar la confianza ciudadana.
Ruptura con Chile Vamos
La inscripción del pacto confirma el quiebre político con la UDI, Renovación Nacional (RN) y Evópoli, tras semanas de conversaciones fallidas para una lista unitaria. El nuevo bloque, compuesto por tres partidos de la derecha y centroderecha, pretende marcar un sello propio, distanciándose de lo que consideran “la política de acuerdos sin resultados” que ha caracterizado a la coalición tradicional.
El acuerdo interno garantiza a cada partido un tercio de los 183 cupos para postular candidatos al Congreso, estableciendo una distribución que, según sus líderes, permitirá “equilibrar fuerzas y dar cabida a nuevos liderazgos”.
Un pacto anunciado en julio
La idea de Cambio por Chile fue presentada a comienzos de julio como una alternativa para canalizar el voto opositor desde una perspectiva más dura en materia de seguridad, orden público y defensa de valores conservadores. Desde entonces, las colectividades han trabajado en la definición de un programa común y en la coordinación territorial para llegar a todas las regiones del país.
Aunque aún no revelan la totalidad de sus candidatos, el bloque afirmó que ya cuenta con nombres competitivos en varias circunscripciones y distritos clave. Entre sus prioridades estará disputar terreno a Chile Vamos en regiones donde históricamente la derecha ha concentrado apoyo, pero también buscar votos en zonas donde la centroizquierda ha mantenido hegemonía.
Posibles pactos por omisión
Pese a la ruptura con la lista unitaria, los dirigentes no cierran la puerta a acuerdos puntuales. Informaron que mantienen conversaciones con la coalición de centroderecha para pactos por omisión en las cuatro regiones donde se elige Senado bajo el sistema binominal, con el fin de no dividir el voto opositor y aumentar las posibilidades de ganar escaños clave.
Este movimiento busca maximizar el rendimiento electoral en un escenario marcado por la fragmentación de la derecha, donde cada división puede significar la pérdida de representación parlamentaria frente al oficialismo.
Elecciones a la vuelta de la esquina
Con el plazo final para inscribir candidaturas fijado para el 18 de agosto, Cambio por Chile afina los últimos detalles de su lista. Según adelantaron sus voceros, el bloque presentará candidatos con “trayectorias limpias, ideas claras y compromiso con la ciudadanía”, enfocándose en propuestas contra la delincuencia, la corrupción y el gasto público ineficiente.
Los líderes recalcaron que su objetivo es “recuperar la confianza perdida en las instituciones” y ofrecer un proyecto que no dependa de los consensos con partidos que —según ellos— han cedido demasiado frente a la agenda del Gobierno.