Hace 19 años que llegó a Colina y esta es la tercera vez que se presenta como candidato a concejal por la UDI en la comuna. La primera vez lo hizo en las elecciones municipales de 2008, pero no consiguió los votos suficientes para llegar al concejo. Luego de un tiempo, tras la renuncia que presentó una de sus compañeras de lista en las elecciones anteriores al concejo municipal, y luego de haber trabajado en la municipalidad formando el Centro del Emprendedor, Boher ocupó el cargo de concejal que había quedado vacante.
Finalmente, tras su campaña en las elecciones municipales 2012, nuevamente llegó al concejo.
Asegura que su inquietud por estar al servicio de la comunidad se inició cuando formó la Junta de Vecinos de Chicureo en el año 1997. Tras ayudar a la resolución de una serie de problemas que había en ese tiempo, decidió dar un paso más. “En ese momento dije ‘si puedo hacer tantas cosas acá, como presidente de la Junta de Vecinos, yo creo que siendo concejal voy a poder aportar más a la comunidad’”, indica Boher a Chicureo Hoy.
Además de pertenecer al concejo municipal, Boher es ingeniero agrónomo, pero se dedica a orientar a microempresarios en la Municipalidad de Cerro Navia.
Hoy va a la reelección porque afirma que tiene que “seguir aportando” y porque tiene proyectos pendientes, como formar la Cooperativa de Compra, que tiene como fin juntar a los microempresarios para que compren a productores y, de esta manera, se facilite el trabajo. “Hay proyectos interesantes y yo estoy trabajando en cómo enfrentar la situación. Hay que subir de categoría Colina y que nos identifiquen con cosas más vanguardistas y proyectos innovadores de los cuales podamos estar orgullosos”, señala.
¿Cuáles son sus propuestas concretas para solucionar el tema de la seguridad?
Como municipalidad no tenemos muchas herramientas. Lo que podemos hacer y lo que hicimos fue redistribuir en cuadrantes la comuna, lo que ha andado bastante bien. (…) Nosotros nos juntamos con Carabineros frecuentemente para ver dónde están los puntos con más problemas. (…) Tenemos rondas permanentes y vehículos municipales. Estamos monitoreando y tratando de que Carabineros llegue cuando hay algo sospechoso.
Agrega también que la subcomisaría de Chicureo ha sido algo “muy positivo” y que otras de las medidas que se han implementado es poner cámaras de seguridad de alta definición junto a iluminarias para contar con imágenes de mejor calidad. Sin embargo, asegura que parte de la solución tiene que ver con los vecinos y cómo trabajan ellos en conjunto. “En Colina centro por lo menos, las calles y los barrios se han ido organizando para tener alarmas comunitarias y para compartir información de lo que pasa. Lamentablemente aquí en Chicureo el individualismo es extremo. Están aislados y a la vez quieren que alguien les solucione el problema, pero eso no es así. Hay que organizarse para tener un sentido común”, asegura el candidato a concejal.
Con los años, Chicureo ha crecido bastante en términos de población, ¿qué piensa hacer en el tema vial?
Hay un tema cultural. No sé si se pueda poner un transporte público tipo Transantiago y si la gente va a querer usarlo. (…) No hay planificación, más que nada es hacer negocios, vender y que después que la gente se las arregle.
Pero entonces, ¿cómo se podría mejorar eso en Colina?
Es algo que tenemos que estudiar porque, la verdad, es que esto va creciendo y cada vez hay más casas y loteos inaugurados. El último año colapsó. ¿Cómo hacerlo? Tenemos que trabajarlo y lo que yo propongo es ver las vías alternativas.
Este año se dieron a conocer los viajes de los concejales y usted está incluido en la lista de aquellos que viajan de la Municipalidad de Colina, ¿de qué manera se justifican estos viajes? ¿en qué parte de la comuna se ha aplicado lo aprendido afuera?
Cuando yo viajo voy a una capacitación, seminario o algún diplomado, por ejemplo, a Inglaterra. Allá, en el tema del transporte, tu empiezas a ver cómo la planificación urbana y el desarrollo van mucho más allá, va por el cuidado del medio ambiente. Lo que hacen es reducir emisiones de CO2. Ellos hablan del arriendo de vehículos, así como se hace con las bicicletas en algunas comunas de acá. Todo eso, se aprende.
Pero, ¿qué cosas concretas se han aplicado en la comuna?
Los basureros bajo tierra. En Claudio Arrau teníamos sostenedores de fierro que terminan quemados, la basura la tiraban en cualquier lado y era una “cochinada”. Eso lo vimos en Lima. Estos son contenedores de acero inoxidable, que no se queman, que no se derriten y no les pasa nada. Ese sector cambió, ahora está todo limpio y la basura no se ve porque está subterránea. Esto se va a implementar en otros lados.
Hemos traído varias ideas también, que a mí me gustan mucho, pero no se han implementado.
Al ser consultado por la gestión de Mario Olavarría, Boher señala que “el trabajo que se ha hecho en Colina ha sido un trabajo súper contundente. En el sentido de la salud y sus espacios, no tienen nada que envidiarle a alguna clínica privada en Santiago”, asegura. Sin embargo, aclara que la problemática está en las horas de espera y en los doctores, quienes no quieren trabajar en la comuna por la lejanía y porque “ganan poco”.
Agrega también que dentro de los aspectos que falta mejorar se encuentra la integración de la comuna. “Chicureo era una población bastante menor y, hoy día, yo creo que estamos en 15.000 o más habitantes y hay que empezar a integrarla como personas que están teniendo requerimientos distintos a los que tienen en Colina centro”, finaliza. CH H
