Una escena poco habitual marcó la mañana en el centro de Santiago con el descenso en rafting por el río Mapocho, una acción simbólica encabezada por el gobernador regional Claudio Orrego en el marco de la campaña nacional “Cuidemos Nuestros Ríos”.
La iniciativa apuntó a poner en valor los cursos de agua urbanos y a reforzar el debate sobre educación ambiental y manejo responsable de residuos.
El trayecto se desarrolló entre el Puente La Concepción y el Parque Los Reyes, y fue organizado por EduCamper y Bestias del Sur Salvaje, con la colaboración de Mapocho Vivo y Santiago Adicto.
La actividad permitió visibilizar los avances en el saneamiento del río, así como las brechas que persisten en la limpieza de sus riberas.
Foto: cedida a Chicureo Hoy
Uno de los ejes de la campaña ha sido el trabajo educativo. A través de la participación de colegios de distintas regiones, se logró recolectar cerca de 12 mil litros de aceite de cocina usado, evitando su vertimiento en cuerpos de agua y generando conciencia ambiental en más de 60 mil hogares.
El fundador de EduCamper, Rodolfo Rada, explicó que el descenso en rafting por el río Mapocho solo puede realizarse durante un periodo acotado del año, asociado al deshielo, y destacó el potencial del río para futuras iniciativas de concientización.
Un cambio de mirada sobre el río
Desde el Gobierno Regional, Claudio Orrego subrayó el sentido simbólico del recorrido y la necesidad de resignificar la relación de la ciudad con el Mapocho. “Durante mucho tiempo el Mapocho fue sinónimo de suciedad y división. Hoy queremos transformarlo. Esta experiencia demuestra que el agua está limpia, lo que está sucio es la ribera, y eso nos obliga a redoblar los esfuerzos en educación ambiental y cuidado del entorno”.
La autoridad regional también adelantó proyectos como la declaratoria del Mapocho como humedal urbano, la recuperación de tajamares, programas educativos y el desarrollo del Mapocho Pedaleable.
Foto: cedida a Chicureo Hoy
Desde una perspectiva territorial, la cofundadora de Turismo Cero, Loreto Aravena, apuntó a la responsabilidad ciudadana como el principal desafío pendiente. “El agua del Mapocho está mucho más limpia de lo que creemos, pero la ribera sigue muy sucia. Eso demuestra que el desafío hoy es la responsabilidad ciudadana. Reciclar, reducir y reutilizar no es un eslogan: es urgente si queremos que nuestros ríos sigan vivos”.
Foto: cedida a Chicureo Hoy
