Foto: Carlo Allegri /Reuters
Donald Trump insiste en cumplir una de sus promesas de campaña más polémicas: la construcción de un muro en la frontera con México para así frenar la inmigración ilegal. La medida ha sido criticada de forma unánime en todo el mundo, y es reconocida por los especialistas como “costosa y con pocos resultados”.
Sin embargo, el Departamento de Seguridad Nacional es el encargado de financiar la incitativa con “fondos y recursos existentes”, y estos, son escasos. De hecho, de los miles de millones de dólares que se necesitan, el departamento solo cuenta con 20 millones de dólares para construir el muro.
Debido a las circunstancias, Trump se vería obligado a pedir financiamiento al Congreso, algo que podría frenar de forma definitiva la iniciativa.
El presidente de la Cámara de Representantes, el republicano Paul Ryan, incluirá la financiación para el muro fronterizo en el presupuesto del próximo año fiscal. El legislador estima que el coste de la construcción alcanzará un rango de entre 12.000 y 15.000 millones de dólares.
Trump ha expresado en varias oportunidades que el muro debe ser pagado por el mismo país vecino, algo que Enrique Peña Nieto y varios ex mandatarios mexicanos han rechazado.
