La Empresa Nacional del Petróleo (Enap) y las compañías YPF, Vista Energy, Shell Argentina y Equinor anunciaron durante la noche del jueves 4 de diciembre la firma de contratos de suministro de crudo.
Los acuerdos, vigentes hasta junio de 2033, permitirán cubrir cerca del 35 % de la demanda anual de petróleo de Enap.
El suministro se transportará mediante el Oleoducto Trasandino (Otasa), infraestructura de más de 400 kilómetros construida en los años 90, que permaneció inactiva durante 17 años y que retomó sus operaciones en 2023. Desde entonces, el ducto volvió a enviar petróleo hacia las instalaciones de Enap en Hualpén, Región del Biobío.
La estatal destacó que los contratos —resultado de más de dos años de negociaciones y pruebas operacionales— involucran un valor proyectado cercano a US$12.000 millones, convirtiéndose en el acuerdo comercial más grande en la historia de la empresa.
Según Enap, este nuevo marco de suministro fortalece la seguridad energética del país y otorga mayor estabilidad al abastecimiento, al reducir la dependencia del transporte marítimo sujeto a factores como el clima o la congestión portuaria.
Asimismo, la adquisición de un crudo con menor contenido de azufre representa beneficios ambientales.
El acuerdo también impulsa el desarrollo logístico de la empresa, ya que facilitará la exportación de petróleo de Vaca Muerta a través del Terminal Marítimo de San Vicente, en Talcahuano, consolidando al puerto como un nuevo hub de salida hacia el océano Pacífico.
“Este es un hito de mucha relevancia y coherencia con las definiciones estratégicas que hemos adoptado y que está en línea con el plan que proyecta Enap al 2040”, señaló el gerente general, Julio Friedmann.






