El Gobierno de Estados Unidos anunció un aumento en el incentivo económico dirigido a migrantes en situación irregular que decidan abandonar el país de forma voluntaria.
El nuevo monto alcanza los US$ 3.000, triplicando el beneficio informado en mayo, e incorpora además el pago del pasaje aéreo hacia el país de origen.
La iniciativa forma parte de una estrategia del Ejecutivo para fomentar la autodeportación voluntaria y reducir los costos asociados a los procesos forzados.
La secretaria del Departamento de Seguridad Nacional, Kristi Noem, explicó que el beneficio está destinado a personas que no han sido detenidas por autoridades migratorias o que se encuentran privadas de libertad sin enfrentar cargos penales.
Según indicó, el programa estará vigente hasta fines de este año y busca ofrecer una salida ordenada a quienes se encuentren de manera irregular en territorio estadounidense.
Desde el organismo se detalló que quienes opten por esta vía deberán realizar el trámite a través de la aplicación oficial CBP Home, plataforma que permite coordinar la salida voluntaria y el pago del incentivo económico.
La autoridad aseguró que el proceso será acompañado por el Estado y permitirá a los beneficiarios retornar a sus países con apoyo logístico y financiero.
De acuerdo con cifras entregadas por el Departamento de Seguridad Nacional, desde enero pasado 1,9 millones de migrantes han optado por la autodeportación voluntaria, incluyendo decenas de miles que utilizaron esta aplicación.
La administración del presidente Donald Trump ha defendido esta política como una alternativa más eficiente, considerando que una deportación forzada tiene un costo promedio cercano a los US$ 17.000 por persona.
La medida ha generado reacciones divididas y críticas desde organizaciones proinmigrantes, que cuestionan el tono de la campaña y el contexto en que se impulsa este programa.
