La preocupación por la inflación registró una fuerte caída en Chile, bajando 9 puntos porcentuales respecto al mes anterior y alcanzando apenas un 18% de menciones entre los encuestados. Así lo revela la última edición del informe “What Worries the World?” (¿Qué preocupa al mundo?) elaborado por Ipsos, empresa líder en investigación de mercados, que recoge mensualmente la percepción de más de 25 mil personas en 29 países.
El estudio correspondiente a abril muestra que Chile se ubica como el tercer país menos preocupado del mundo por la inflación, sólo por detrás de Perú (14%) e Israel (15%). Este cambio va de la mano con una mejora en la percepción económica: un 33% de los chilenos evalúa positivamente la situación actual, 6 puntos más que el mes pasado, y un 31% cree que el país va en la dirección correcta.
A pesar de esta mejora en el ánimo económico, el crimen y la violencia se mantienen como la principal preocupación para los chilenos, con un 66% de menciones. Esta cifra ubica a Chile como el segundo país más preocupado del mundo por la delincuencia, sólo superado por Perú (75%) y muy por sobre el promedio global de 32%.
En segundo lugar aparece el control de la inmigración, con un 47% de menciones, tres puntos más que en marzo. Chile lidera este ítem a nivel global, superando incluso a países como Alemania (42%) y quedando 30 puntos por sobre el promedio mundial.
La corrupción también sube en el ranking, pasando al tercer lugar con un 33% de menciones, 5 puntos más que el mes anterior, y desplazando al desempleo, que baja al cuarto lugar con un 31%.
Por otro lado, la preocupación por la pobreza y la desigualdad se mantiene baja, con un 23%, lo que posiciona a Chile como el país menos preocupado por este tema en Sudamérica. En contraste, Argentina (39%), Brasil (34%) y Perú y Colombia (32%) muestran niveles significativamente más altos.
Jean-Christophe Salles, CEO de Ipsos en Latinoamérica, destacó los principales hallazgos del informe:
“En abril, el hecho más notable es la caída de la preocupación por la inflación, que permite una mejora de la percepción de la situación económica actual. Esto está en línea con una cierta recuperación de la confianza de los consumidores en sus capacidades de ahorro e inversión. Por otro lado, es la primera vez desde octubre de 2024 que observamos una baja —aunque ligera— de la preocupación por el crimen y violencia”.
