La laguna de Aculeo fue declarada oficialmente humedal urbano, una decisión que busca reforzar la protección de uno de los ecosistemas más emblemáticos de la Región Metropolitana.
La medida fue adoptada por el Ministerio de Medio Ambiente e incorpora también a los esteros Pintué y Santa Marta, todos ubicados en la comuna de Paine.
El reconocimiento establece un marco legal más estricto para ordenar las actividades que se desarrollan en el entorno y apunta a resguardar la recuperación del sistema hídrico, luego de años marcados por una severa sequía.
De origen pluvial, este cuerpo de agua llegó a secarse completamente en 2018, convirtiéndose en un símbolo de los efectos del cambio climático y de una gestión poco sustentable de los recursos naturales.
Protección ambiental y uso responsable
Según la resolución publicada el 18 de diciembre en el Diario Oficial, la superficie protegida alcanza las 1.107,52 hectáreas.
El documento identifica amenazas relevantes para la laguna de Aculeo, como la sequía prolongada que afecta a la zona central desde 2010, el desvío de aguas para fines agrícolas y domiciliarios, la expansión inmobiliaria sin planificación hídrica y la eutrofización asociada al aumento de actividades productivas y recreativas.
También se mencionan problemáticas como la presencia de basurales, la extracción de áridos, el uso del lecho para actividades deportivas y la apropiación ilegal de sectores del humedal.
Frente a este escenario, el ministerio aclaró que la declaratoria no implica cerrar el acceso al lugar, sino regular su uso de manera racional.
Las intervenciones relevantes deberán evaluarse considerando funciones clave como la recarga de acuíferos, la regulación de escorrentías y la conservación de la biodiversidad.
Las actividades recreativas podrán desarrollarse, siempre que sean compatibles con la protección del ecosistema y respeten períodos sensibles para la fauna.
Ahora será la Municipalidad de Paine la encargada de elaborar una Ordenanza Municipal de Humedales Urbanos.
Esta normativa deberá compatibilizar el turismo, las necesidades de las comunidades cercanas y la preservación ambiental, incorporando medidas concretas como manejo de residuos, control de rellenos y reglas claras de uso.
El alcalde Rodrigo Contreras valoró la decisión, señalando que permitirá avanzar en un trabajo conjunto con la comunidad para asegurar un uso sostenible del recurso hídrico y la protección de la flora, fauna y la actividad agrícola local.
