El pingüino de Humboldt, ave marina endémica de las costas de Chile y Perú, fue recientemente catalogado en estado de “peligro”, tras una alarmante disminución en sus colonias reproductivas. La combinación de cambio climático, enfermedades y acción humana ha puesto en riesgo la continuidad de esta especie símbolo del Pacífico sur.
De acuerdo con la veterinaria especialista en pingüinos, Paulina Arce, en las últimas décadas se ha observado una reducción constante en sus poblaciones. “En todas las islas que hemos censado, los nidos y la cantidad de pingüinos han disminuido o se han mantenido, pero ninguna ha aumentado”, explicó.
Entre las principales causas destacan los factores antrópicos, es decir, aquellos originados por la actividad humana. La pesca industrial, la contaminación marina y la presencia sin control de animales domésticos en las costas han contribuido al deterioro de su hábitat natural.
En este sentido, Diego Peñaloza Madrid, presidente de la Fundación Safari Conservation, señaló que “la mayoría de las amenazas son por causas humanas, desde la falta de supervisión de mascotas hasta los artes de pesca que destruyen su entorno”.
A ello se suma el impacto del cambio climático. Fenómenos como El Niño han alterado las corrientes marinas, reduciendo la disponibilidad de alimento y aumentando la vulnerabilidad frente a enfermedades como la gripe aviar. Según Javiera Meza, de Conaf, la coincidencia de ambos factores “fue la tormenta perfecta”, ya que en el norte del país la reproducción “bajó casi a cero”.
En Perú, el panorama es similar: las colonias también sufren un declive acelerado, evidenciando una crisis regional que amenaza la supervivencia de una de las especies más representativas del ecosistema marino del Pacífico sur.