Este lunes 19 de mayo, el Banco Central de Chile informó que el Producto Interno Bruto (PIB) del país creció un 2,3 % en el primer trimestre de 2025, en comparación con el mismo período del año anterior. Supera, así, las proyecciones del mercado que anticipaban un alza del 2 %.
El crecimiento fue impulsado principalmente por un aumento del 10,7 % en las exportaciones, donde destacan los envíos de frutas y minerales, así como un incremento del gasto en turismo en el sector de servicios. Desde la perspectiva del origen, las actividades que más contribuyeron al crecimiento del PIB fueron el comercio, la industria manufacturera, los servicios personales y el sector agropecuario y silvícola.
En contraste, sectores como la minería, los servicios financieros y la construcción registraron caídas durante el primer trimestre. La producción de cobre se vio afectada por condiciones climáticas adversas, mantenimientos programados y una menor ley mineral.
Desde la perspectiva del gasto, la demanda interna aumentó en un 1,2 %, reflejo de un mayor consumo de los hogares, que creció un 1,8%, impulsado por bienes durables como productos tecnológicos y bienes no durables como vestuario y calzado.
En términos desestacionalizados, la actividad económica evidenció una aceleración del 0,7 % en comparación con el trimestre anterior.
Analistas prevén que el crecimiento económico podría desacelerarse en los próximos trimestres debido condiciones externas menos favorables. Sin embargo, se espera que la actividad económica de Chile se mantenga relativamente resiliente.
Este desempeño económico positivo ofrece un respiro en medio de un contexto global desafiante y refuerza las proyecciones del Banco Central, que estima un crecimiento económico para 2025 en un rango entre 1,75 % y 2,75 %.
Revisa la Cuenta Nacional Trimestral publicada por el Banco Central en el siguiente enlace.
