Tras su triunfo en la segunda vuelta, el presidente electo José Antonio Kast entregó su primer discurso frente a sus adherentes en la comuna de Las Condes.
El candidato republicano —que renunciará a su partido al asumir su cargo— comenzó agradeciendo a su familia y posteriormente se dirigió a sus adherentes. “Esta noche no estamos solos, hay miles de personas”, señaló.
“Ustedes pueden ver la alegría que se ha generado, en muchas ciudades, en muchas regiones a lo largo de Chile. Miles, millones de chilenos decidieron ponerse de pie, volver a levantarse y quiero decir con seriedad, pero también con emoción que este no es un triunfo personal, aquí ganó Chile, ganó la esperanza de vivir sin miedo”, añadió.
Más adelante, se refirió a su contrincante en las elecciones, la candidata Jeannette Jara.
“Voy a pedir algo muy especial, voy a pedir un momento de profundo respeto y silencio. Un gobierno tiene partidarios y opositores, y eso es normal y legítimo. Con Jeannette Jara tenemos profundas diferencias”, sostuvo.
Ante los abucheos de los asistentes, el republicano solicitó “respeto y silencio”, agregando que aquello “va a marcar nuestra gestión del gobierno: el respeto, porque si no lo logramos la división va a seguir de manera permanente. Podemos tener diferencias duras, podemos querer algo muy distinto para nuestra sociedad, pero si prima la violencia y los gritos es muy difícil que salgamos adelante”.
“Para enfrentar la crisis que hoy tenemos los necesitamos a todos. Cada uno decidirá libremente; en el Parlamento, en los municipios, si quiere sumarse a la recuperación, al renacer de Chile, eso queda en la libertad de cada uno, pero nosotros vamos a trabajar incansablemente por recuperar la tranquilidad, el orden, el crecimiento, la esperanza, porque Chile nos ha dado un mandato claro que no admite excusas, no permite demoras, no quiere continuidad. Lo dijo fuerte y claro y les digo que sí, Chile va a tener un cambio real”.
Agradecimientos a los expresidentes
También agradeció al expresidente Eduardo Frei, con quien se reunió en las semanas previas al balotaje y, sorpresivamente, a los expresidentes Patricio Aylwyn, Ricardo Lagos y Michell Bachelet, señalando que, aunque no comparte sus ideales, “también creen en Chile”. Asimismo, hizo una mención al expresidente Sebastián Piñera.
En ningún momento hizo alusión al presidente Gabriel Boric.
Criminalidad e inmigrantes
En otra parte de su alocución, José Antonio Kast se refirió a los delincuentes, a quienes hizo el llamado a entregarse a la justicia para no gastar recursos públicos en rastrearlos y detenerlos.
Respecto a los inmigrantes irregulares, sostuvo que deberán abandonar el país, mientras que quienes se encuentren de manera irregular, si cometen un crimen, también tendrán que hacerlo. No obstante, se tomó un instante para agradecer a los médicos extranjeros que ejercen en Chile, pues sin ellos el sistema de salud no podría sostenerse ni abarcar el basto territorio nacional.
Prioridades
Según señaló, los principales ejes de su gobierno serán la seguridad, inmigración y el progreso económico.
“Vamos a ser un gobierno en terreno, vamos a ser un gobierno que se preocupar de cada uno de ustedes. Quizás no vamos a tener todas las soluciones, pero a mí me ha tocado recorrer Chile entero y llevo grabado en mi mente cada dolor en cada comuna que he visitado”, comentó, expresando que “Chile se detuvo y hay que volver a ponerlo en marcha”.
Para concluir, expuso que “todos podemos hacer algo por mejorar la calidad de vida de nuestros compatriotas. Esto requiere el máximo esfuerzo durante los próximos cuatro años”.
“No nos pidan milagros, pídanos energía, valentía, firmeza para unir al país. El trabajo trabajo mañana, el trabajo pre-presidencial, el trabajo presidencial parte el 11 de marzo, donde todos tenemos que sorprender a los chilenos”, finalizó.






