Un nuevo grupo de ciudadanos chilenos expulsados desde Estados Unidos llegará esta noche al Aeropuerto Internacional Arturo Merino Benítez. El vuelo forma parte del operativo de repatriación coordinado entre ambos gobiernos ante el endurecimiento de las políticas migratorias impulsadas por la administración de Donald Trump.
A diferencia de los vuelos anteriores, en esta ocasión la cantidad de deportados será menor. Según información preliminar, se trataría de unos 15 connacionales, mientras que en mayo y junio arribaron aviones con 45 y 43 personas, respectivamente. La mayoría había sido expulsada por incumplir los plazos de permanencia autorizados en el país del norte, pero algunos enfrentaban cargos por delitos cometidos en ese territorio.
Expulsado por robo
Entre los pasajeros de este tercer vuelo podría encontrarse un chileno acusado de participar en el robo de la cartera de Kristi Noem, secretaria de Seguridad Nacional de Estados Unidos. El delito ocurrió en abril, mientras la funcionaria comía con su familia en un restaurante de Washington D.C. Las cámaras de seguridad registraron cómo un sujeto enmascarado se llevó su bolso, el cual contenía tres mil dólares en efectivo, documentos oficiales, medicamentos y llaves personales.
El chileno fue arrestado días después y calificado por las autoridades estadounidenses como un “delincuente profesional”, que llevaba años viviendo ilegalmente en ese país.
Controles al llegar a Chile
Una vez que el avión aterrice, la Policía de Investigaciones realizará el control migratorio correspondiente para verificar si alguno de los repatriados tiene órdenes de detención vigentes en Chile. En esos casos, serán puestos a disposición de los tribunales.
Respecto a los delitos cometidos en el extranjero, el ministro Elizalde fue enfático: “Si una persona ha cometido delitos en Estados Unidos, por el principio de territorialidad tiene que ser juzgado y sancionado allá”. CHH
