La Roja femenina no dejó dudas en su último amistoso antes de la Copa América Femenina 2025. Este jueves 3 de julio, en el Estadio Bicentenario de La Florida, la selección chilena derrotó por 5‑0 a Bolivia, dejando buenas sensaciones en juego, funcionamiento colectivo y contundencia ofensiva.
Desde el arranque, el equipo dirigido por Luis Mena impuso el ritmo del partido, dominando la posesión y anulando a su rival con presión alta y circulación fluida del balón. La superioridad se tradujo en goles y confianza de cara al torneo continental.
Las anotaciones fueron obra de:
- Michelle Olivares, quien abrió el marcador al final del primer tiempo (45+1’).
- Sonya Keefe, autora de un doblete en la segunda parte (59’ y 84’).
- Catalina Figueroa (89’) y Pamela Cabezas (90+2’) cerraron la goleada con definiciones precisas en el área.
Números que respaldan la actuación
Chile tuvo el control total del partido, con más del 70% de posesión, 18 remates y 10 tiros al arco. Bolivia, en cambio, solo generó una ocasión clara al inicio del encuentro, bien resuelta por la arquera Antonia Canales, quien sigue consolidándose como figura en el arco nacional.
El mediocampo, liderado por Karen Araya, manejó los tiempos del encuentro, mientras que la zaga defensiva prácticamente no fue exigida, mostrando orden y buena salida desde el fondo.
Próximo destino: Ecuador
Tras la contundente victoria, el equipo emprenderá viaje el miércoles 9 de julio rumbo a Ecuador, donde se disputará la Copa América Femenina 2025. Chile debutará el sábado 12 de julio ante Perú, en un grupo que también incluye a Argentina, Uruguay y el país anfitrión.
Este torneo no solo entrega prestigio continental, sino que también reparte cupos para el Mundial Femenino 2027 y los Juegos Olímpicos de París 2028, lo que convierte cada partido en una final anticipada.
Un equipo que ilusiona
La Roja femenina llega al certamen con una base de jugadoras consolidadas y una nueva generación que comienza a ganar protagonismo. Jugadoras como Sonya Keefe, Michelle Olivares y Catalina Figueroa asoman como el recambio necesario, mientras que nombres como Karen Araya, Camila Sáez y Daniela Zamora aportan experiencia en momentos clave.
Con un estilo ofensivo y una identidad clara, el equipo nacional se perfila como un serio aspirante a pelear los primeros puestos. El desafío ahora será mantener el nivel mostrado en los amistosos, y trasladarlo al terreno competitivo de la Copa América.
El 5‑0 ante Bolivia no solo fue una goleada; fue una declaración de intenciones. La Roja femenina quiere volver a hacer historia.
