La tecnología existente hoy en día y la constante conexión a un mundo cada vez más ilimitado, ha hecho que ser padres sea aún más difícil. Tratar de controlar la enorme cantidad de información a la que los niños acceden en la actualidad a través de diferentes canales y dispositivos, se ha convertido en una tarea titánica para los progenitores.
Según una encuesta global realizada por Kaspersky Lab en 2017, el 57% de los niños entre 8 y 16 años oculta a sus padres las actividades que realiza en línea. Esta cifra cae a 53% en el rango de 14 a 16 años. Por otro lado, un 70% de los padres desconoce que sus hijos esconden actividades en línea potencialmente peligrosas para ellos. Dichas actividades van desde ver contenido inapropiado hasta sufrir cyberbullying.
Al respecto, el estudio también reveló que, en general, 6 de cada 10 niños teme ser víctima de acoso cibernético, el 20% conoce a alguien que ha sido ciberacosado y el 7% asegura haber participado en algún acoso cibernético. De éstos, el 41% se sintió desamparado, el 37% había perdido la autoestima y el 30% había bajado su rendimiento escolar.
El estudio también reveló que el 57% de los encuestados utiliza su verdadero nombre en la red, el 47% utiliza su edad real y el 40% comparte a qué escuela va. Si a esos datos se añade que el 14% revela dónde vive y el 11% comparte las ganancias de sus padres, se tienen todos los ingredientes para que los ciberdelincuentes puedan secuestrar, suplantar o acosar a los niños. De ahí la importancia de enseñarles lo primordial que es la privacidad.
En el marco de la celebración del Día del Niño, Kaspersky Lab recomendaciones para garantizar que los pequeños estén seguros cuando permanecen “en línea”:
- Ubica las computadoras en áreas familiares comunesy no dejes a los niños utilizar los dispositivos electrónicos lejos de ti.
- Configura el acceso restringido a sitios web con contenido no deseado y explícale a tus hijos por qué no deben publicar la dirección precisa de su casa o hacer check in en redes sociales cada vez que visita un lugar.
- Uso de aplicaciones. Hay aplicaciones que son potencialmente peligrosas, por ejemplo, aquellas que contienen escenas de violencia. Por eso es importante que los padres restrinjan las aplicaciones que un niño puede instalar o abrir en los dispositivos. CHH
